Los mortales me conocen por Dionicio, la inmortalidad me llama E-T-A-G, y sé perfectamente que yo: no soy psicólogo.
Para mí, la psicología es un sueño dorado, pero utópico, hoy lo he comprendido. El comportamiento humano, sus pensamientos, su evolución ideológica es fascinante; pero no es mi campo, y lo admito. ¿La razón? Sencilla, es catastrófico para mí, algunas cosas que la sociedad me muestra; son asfixiantes aquellas crueldades que el humano provoca. Debo admitir que hay acontecimientos, pensamientos exitantes, pero los que me duelen, me hacen querer destruir al mundo, y la verdad es que ninguna de las dos está bien; si no me equivoco, necesito no sentir.
Simplemente no estaré ahí. Ésta vida tal vez se dedique más a la fantasía, al mundo donde hay cuentos, al lugar donde no existirá nada más que la dicha expresada retorcidamente. Las letras son mi último recurso.
Que tengan muy buen día.
3 comentarios:
No son tu último recurso, son un desahogo, un grito al vacío, que aunque inútil hace que saques lo que tienes atascado.
Te quiero mucho.
wow..que lindo lo que escribes....! me gusto mucho perdon si me tomo el atrevimiento de escribir y comentar..solo llegue aqui de casualidad..y como la casualidad no existe...
que mas me queda..felicitarte sigue asi pasare cada vez k pueda lastima k no tengas seguidores sino seria seguidora tuya adios
XD te amo cosi gay, no maaa me asustas masivo
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