sábado, 27 de diciembre de 2008

Ay de la vida y la muerte.

No pienso teclear mucho, la verdad es que tengo algo de sueño, pero deseaba expresar algo muy interesante en lo que me quedé pensando la pasada tarde.

Creo que algo muy seductor de la vida es estar consciente de lo indeterminado, insospechado que pueden llegarnos las cosas cada día, y siendo franco, considero que eso es increíblemente fascinante; podrían mañana asesinarme en la calle, podrían atropellarme paseando por la colonia, podrían asaltarme y violar mi cuerpo desangrado, ¿a poco no suena increíble? Yo digo que sí, bastante.

Incontables veces he fantaseado con cosas de lo más “agradables” para esos momentos; obviamente pensar en matar gente no debe ser tan saludable –y creo que estoy diciendo muchas cosas incoherentes- pero, carajo, es tan delicioso imaginar personas con el cráneo destrozado por el golpe de un extintor en mis brazos, con el cuello sangrando por el cuchillo que utilizo para cortar su carne y devorarla, por sentir sus órganos frescos en mi miembro. Oh…

En verdad pensar que todo puede pasar de un día a otro, de un segundo a otro, es maravilloso. No sé a ciencia cierta si quiero publicar este post, así que lo decidirá la moneda, jaja.

¿No esperar nada de la vida es recibirlo todo de ella? Si es así, me encanta. Porque soy tan común como cualquier otro, y lo que podría desear no lo tendré. Entonces cuando no espero algo es cuando recibo algo mil veces mejor, qué cosas… jajajaja

Ay, de la vida, definitivamente… lo único malo de morir quizá sea lo aburrido que podría ser… y aún así digo que: “me gustaría estar durmiendo”. Buenas noches.

No hay comentarios.: